Bueno, ya pasó San Valentín y, según leí en varios blogs, la gente no disfruta mucho de este día, sino que más bien lo odia (muchos porque están solos y, aunque digan que no les importa, realmente no quieren estar solos; otros porque estando de novios dicen que no saben qué hacer y que es una fiesta capitalista; otros simplemente porque les gusta quejarse de cualquier cosa).
Pero... ¿qué se festeja? ¿por qué un 14 de febrero?
Buscando en internet, como siempre (no pretendan que busque en una enciclopedia gigante o me vaya a una biblioteca), encontré muchas historias totalmente distintas, acá va una de las que más me gustó:
Según la tradición cristiana San Valentín fue un monje cristiano -otros dicen que un Obispo, que vivió en la última época del Imperio Romano, aproximadamente en el año 250 d.C.
Por esos años, Claudio III, era el emperador, quien dictó un decreto que consistía en la imposibilidad de los jóvenes romanos para contraer nupcias, aduciendo que aquellos eran mejores soldados cuando no tenían ni esposa ni familia.
Valentín se opuso a dicha medida, casando a todos aquellos que llegaban hasta él. Al cabo de un tiempo se le sorprendió en dichas prácticas, fue tomado prisionero y asesinado en el año 270 d.C., justamente un 14 de febrero.